12 Sep ¿Harto/a de consumir?. Ponte a dieta
Tiempo de lectura: 3 minutos2016-09-12, Marian López
Consumir es adictivo. Vivimos en una sociedad abocada al consumo feroz. Si no te compras el móvil de última generación es porque no quieres.
Tanto comercios como financieras lo saben y nos ofrecen todo tipo de facilidades para acceder a productos impensables para nuestros bolsillos hace tan sólo unos años.
Ahora tener lo último en tecnología, comprarte ese bolso carísimo o el reloj con el que llevas soñando tanto tiempo, ya no son quimeras inalcanzables.
Las tarjetas, los mini créditos o la financiación de compras a plazos, nos ofrecen un universo de posibilidades para que esos «caprichos» puedan ser nuestros casi sin esfuerzo. Pero, ¿realmente los necesitamos?, ¿o podemos prescindir de ellos?.
En mi familia, tengo un caso muy cercano de alguien que trabaja más de 40 horas a la semana y nunca tiene dinero. ¿El problema?. Se gasta todo lo que tiene y más. ¿Por qué?. Porque comprar es su «nirvana» particular.
No sé si conocéis a Anna Newell Jones. Esta joven estadounidense tenía una adicción: la de consumir. Gastaba sin control hasta tal punto que se encontró con una deuda de casi 21.000 euros y sin dinero para poder devolverla.
Anna empezó con un «ayuno de consumo» que pasó a convertirse en una «dieta de consumo» con la que, en poco más de un año, consiguió saldar su deuda.
Ha decidido plasmar su éxito personal en un libro que os recomiendo encarecidamente titulado «The Spender’s Guide to Debt-Free Living» (La guía del gastador para vivir libre de deudas).
No es difícil pasar de consumir vorazmente a restringir tus gastos. Tan sólo es necesario tener algo de fuerza de voluntad.
¿Cómo consiguió Anna Newell frenar su afán consumista y saldar su deuda?.
El primer año (según cuenta ella misma), es el peor. Lo que ella denomina «ayuno de consumo«. Es la fase más estricta en la que sólo vivía con lo esencial. Todo su gasto iba destinado a la comida como elemento de primera necesidad.
El segundo año, comenzó la «fase dos» de su experimento, denominada «dieta de consumo«. Durante esta segunda fase, se podía permitir algunos «caprichos» y se puso un tope de menos de 90 euros al mes.
Aún así, siempre tienes que seguir luchando contra esa «vocecita» interior que te incita a consumir. Es muy fácil dejarse llevar y volver a la rueda de la que habías salido.
¿Qué trucos podéis seguir para conseguir ahorrar?.
Consumir es fácil: basta con llegar a la tienda o meterte en la página web deseada y sacar tu tarjeta. El problema viene cuando ya ni siquiera la tarjeta te responde.
No son pocos los que piden un mini crédito para saldar la deuda de su tarjeta y no se dan cuenta de que con ello, lo único que consiguen es endeudarse aún más.
Ahorrar es mucho más difícil que consumir. Por eso es necesario aplicar algunos trucos que os ayuden a conseguirlo.
1.- Toma conciencia de tu problema. Es la «regla de oro«. Lo primero que deberemos hacer es ser conscientes de que tenemos un problema que se llama endeudamiento, y del que hay que salir.
2.- Analiza tu situación. ¡Párate a pensar!. Analiza el estado en el que te encuentras. Quizás te gusta consumir comprando cosas que no son necesarias, pero puedes afrontar el gasto que ello supone.
Lo que ocurre es que en la mayoría de casos, nos gusta consumir y lo hacemos sin analizar las consecuencias que puede tener en nuestra economía. Generalmente, no podemos asumir los gastos que acarrean esas compras sin control.
3.- Ordena tus deudas. Si los gastos proceden de varios sitios (tarjetas de crédito, préstamos), prioriza e intenta liquidar antes aquéllos por los que te van a cobrar más intereses para «quitártelos de encima» rápidamente.
4.- Planifica tus gastos. Coge un folio y divídelo en dos partes. Una será la lista de «necesidades» y la otra, la de «deseos«.
Dentro de la lista de necesidades estarían: la comida, la hipoteca o alquiler, los gastos de casa, las medicinas (en caso de que las tomases) o el teléfono.
En la lista de deseos entrarían los «caprichos» o los gastos más superfluos como los regalos, renovar el armario con alguna prenda de temporada, ir al cine, comer fuera de casa, etc.
Antes de consumir y caer en la tentación de comprar algo, hay que hacerse la gran pregunta: ¿realmente lo necesito?.
En www.garciaslopezasesores.es, creemos que una correcta planificación de tus finanzas es clave para mantener un buen rumbo en nuestra economía doméstica.
Ordenar nuestras cuentas, estar al día con los pagos y mantener a raya los gastos, son pautas que deberían convertirse en una rutina.
Parece sencillo, pero es difícil no sucumbir a la tentación en una sociedad consumista como la nuestra. Todo es cuestión de proponérselo. Ya lo decía Sófocles: «El éxito depende del esfuerzo«.
Pues ya sabéis… ¡A triunfar!.
La semana que viene, volveremos con un nuevo tema. Hasta entonces, por favor, sed felices.